Viggo Mortensen
28/6/12
Ahora sí. Muy ordenado el partido contra Instituto de parte de Caruso Lombardi, y harmonioso todo el equipo. Victoria merecida contra un rival complicado, ejecución casi perfecta en todos lados. Y entonces el domingo tendremos el lujo de contar con los veteranos en casa si La Gloria se pone brava en el segundo partido. Nos tendrán que ganar por 3 goles para ascender. Poco probable, pero no es imposible. No podemos bajar la guardia, aflojar la presión a los de Franco. Felicitaciones a todos los nuestros por el excelente partido. Migliore, Buffarini, Bueno, Kalinski, Salgueiro… excelentes todos, y en realidad casi el mejor juego de equipo que tuvo San Lorenzo todo el torneo. Gracias, Caruso Lombardi, por la buena preparación del equipo y gracias a los hinchas Cuervos por apoyar en el estadio rival con tanta constancia, tanta fuerza. Esto es San Lorenzo. A ver si sale igual de tranquilo y enfocado el equipo en nuestro estadio el domingo como lo hicieron en Córdoba.

Hay otro torneo importante, en Europa, y ya tenemos dos finalistas. España, el vigente campeón, que aguantó a la feroz selección Portuguesa en la primera semifinal, e Italia, que destrozó a una Alemania que parecía tener pinta de campeón en la segunda. Los italianos van creciendo, como suelen hacerlo en estos campeonatos, y se van convirtiendo en verdaderos monstruos. Ojo, Vicente Del Bosque, me parece que vas a tener que poner delantero centro el domingo. Va a ser lindo el partido.

Se ha hablado mucho en Europa últimamente del próximo Balón De Oro – de quién lo merece, quién lo ganará, si alguien se lo puede arrebatar a Messi… Bueno, la verdad es que es Cristiano Ronaldo es el que más habla de eso, y por consecuencia ha sido un tema popular en los medios durante la Eurocopa – especialmente en los medios portugueses. Algunos italianos hablan de Pirlo, pero Pirlo no habla de Pirlo. Por muy absurdo que me parezca imaginarme que Messi no va a ganar un cuarto trofeo al mejor jugador del planeta, creo que lo de Cristiano merece un capítulo aparte. Ahí va:
CAGONES DE ORO

El comportamiento arrogante y resentido de Cristiano Ronaldo en la Eurocopa 2012 no es nuevo. Le hemos visto pasear su narcisismo casi sin parar desde que vino al Real Madrid. Los hinchas merengues que prefieren las tradiciones más nobles con respecto a la manera de jugar, ganar y perder han tenido que aguantar cada vez más la altivez y los pataleos infantiles de este jugador. A muchos simpatizantes del equipo de Casillas, Zidane, Raúl, Juanito, Hierro, Puskas, DiStefano, etc. — y me incluyo entre estos — nos da asco el comportamiento egoísta y vanidoso de Cristiano. Cuando él jugaba para el Manchester United, Ferguson lo manejaba con correa bien corta, pero el maestro escocés no siempre pudo controlar al niño mimado. Véase, por ejemplo, la falta de respeto (y ayuda) a sus compañeros de Cristiano en la final de la Champions de 2009 que perdió el Manchester United contra el soberbio Barcelona de Messi. Ahí también, como siempre, el portugués mostró ser muy mal perdedor.

Su compatriota Mourinho, que lo dirige en el Real Madrid, le permite infinitas boludeces y una consistente falta de esfuerzo colectivo. Parece que no se empeña en hacer más que mirarse en el espejo, quejarse, pedir atención mediática y premios – pedir en general que todas las miradas y los elogios sean para él. Es un gran ejemplo de preparación y condición física, eso sí. Es veloz, es ágil, es fuerte, sabe regatear, es capaz de pasar la pelota bien. Podría ganar ese segundo Balón de Oro del que tanto habla, podría ganarlo sin la más mínima auto-promoción si fuera un verdadero jugador de equipo y más deportivo en su conducta personal en la cancha. Para que esos cambios de carácter y actitud sucedan algún adulto responsable tendrá que hacer un gran esfuerzo para enseñarle a comportarse como un jugador grande y un caballero, si es que ya no es demasiado tarde. Mourinho no lo hará porque es igual de egoísta y mal perdedor que Cristiano Ronaldo. Mourinho no es un caballero, y no busca caballeros. Los rehuye.

En el partido de semifinales entre Portugal y España, Cristiano se portó con el egoísmo y las chulerías que lo caracterizan, y no supo mostrar ni un poco de humildad o dignidad al perder. No me sorprendería si fuera un poco menos frustrante para él la derrota de Portugal que no poder lanzar el último penalti de su equipo como había exigido para chupar foco e intentar ser el héroe mediático de la noche. Fracasada su estrategia, este Cagón De Oro abandona la cancha sin adiós ni gracia, como le ha enseñado Mourinho a él y al Real Madrid (contagiando hasta el equipo de basket del club, cuya falta de nobleza se vio hace poco cuando fueron derrotados por el Barcelona en una gran final). Con tantos compañeros “merengues” supuestamente amigos en el equipo contrario, lo correcto hubiera sido saludar, felicitar y despedirse bien de los españoles después del intenso partido. Como su técnico y la gran mayoría del equipo portugués se habían portado tan mal como él, la notable falta de educación de Cristiano Ronaldo no se notó tanto como en otras ocasiones. Hubo una excepción para destacar: Pepe, compañero de Cristiano en el Real Madrid, sorprendió al no seguir el pésimo ejemplo del 7 y el resto de los portugueses cuando cruzó la cancha para a felicitarlo a Casillas y a otros del equipo español por la sufrida victoria. Pepe jugó muy duro, como suele hacerlo, como siempre haciendo bastante “teatro” para compensar por sus entradas fuertes, pero luchó y perdió muy bien. Para Cristiano ese sería un ejemplo a seguir.

También sería un ejemplo a seguir para Paulo Bento, el técnico de Portugal, y su selección. Casi les salió la estrategia “Mourinhana” de acosar al árbitro todo el partido (y toda la semana previa en los medios de comunicación) para así conseguir una leve ventaja psicológica sobre el referí turco que les permitiría dar patadas y jugar a lo burro casi todo el partido. Casi.

Esto no era necesario, como no lo es para el Real Madrid. Es una actitud, una ideología muy fea – de tramposos, de paranoicos amargados, de malos perdedores – que a veces trae victorias pero nunca te puede llevar a ser un digno campeón. Tanto la selección de Portugal en la Eurocopa 2012 como el Real Madrid de los últimos dos años (o la Holanda de las mil patadas que vimos en la final del último mundial) han tenido de sobra el talento para jugar bien y limpio. Los técnicos de estos equipos – y los patrones que los contrataron – han elegido el fútbol feo y tramposo, y se lo exigen a sus jugadores. Es bastante evidente que a veces la conducta machiavelica da resultados y copas. Lo cierto es que siempre da vergüenza.
Felicitaciones a Vicente Del Bosque y a su selección por el gran torneo que están haciendo como deportistas y como personas educadas en la Eurocopa 2012.

Santiago Solari escribió una nota para El País sobre el llamado CR7. Escribe muy bien “El Indiecito”. Ojalá se hubiera podido quedar con San Lorenzo un poco más. Una jugador elegante y un hombre sincero. Ahí va lo que recién puso él:
La foto que no fue
Avanzaba la tanda y empecé a sospechar que algo raro ocurría. El mejor pateador, el mejor futbolista y el máximo protagonista no era el primero de la lista
SANTIAGO SOLARI – EL PAÍS -28 JUN 2012

Cristiano, durante la tanda de penaltis / FRANCK FIFE (AFP)
La segunda vez que vi The Shining (El Resplandor), de Stanley Kubrick, no tuvo el mismo efecto la famosa escena en la que la protagonista, Wendy, encuentra primero en una hoja sobre la máquina de escribir y luego en los cientos de páginas de la novela que supuestamente escribía su marido la misma frase repetida maniáticamente una y otra vez. El horror psicológico ya no era tal. No solo porque carecía de la sorpresa de la primera vez, sino también porque, al tratarse de una versión doblada, traducía la frase repetida en las hojas. La original, All work and no play makes Jack a dull boy, había sido cambiada por un refrán autóctono: “Más vale pájaro en mano que ciento volando”. Lo cual disminuía el efecto de la versión original al eliminar la autorreferencia de Jack Torrance, el personaje del escritor, homónimo de Jack Nicholson, el protagonista.
“Al no ver patear a Cristiano, solo pensaba
en lo peligroso que puede resultar el ego”
Ayer, a medida que se sucedían los penaltis, pensaba en la estrategia de los portugueses. En las razones por las cuales, en contra de todos los manuales, el mejor pateador, el mejor futbolista y el máximo protagonista no era el primero de la lista. A medida que la tanda avanzaba, empecé a sospechar, igual que Wendy, que algo raro ocurría. Descartada una lesión, pensé en que iría el segundo…, el tercero… Cuando Alves tomó carrera para patear el cuarto, descubrí, no sin horror deportivo, que quizá el mejor pateador no pateaba porque, atrapado dentro de sí mismo, como Jack en el solitario hotel Overlook, pensaba guardar su tiro para un momento que estuviera a su altura. Para el final. Para la foto.
Tras el gol de Cesc en la definición, que dio el merecido pase a la final a España, solo podía pensar en lo peligroso que puede resultar el ego, en la fragilidad que suelen tener los futuros imaginados y en aquella frase, frenéticamente mecanografiada por Jack en su novela en la versión doblada de la película de Kubrick. No le vendría mal a Cristiano repasar esa novela de Jack.