Viggo Mortensen
1/4/2012
“Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos. Era la era de la sabiduría, era la era de la tontería. Era época de creencia, era época de incredulidad. Era la estación de la luz, era la estación de la oscuridad. Era la primavera de la esperanza, era el invierno de la desesperanza. Teníamos todo por delante, no teníamos nada por delante. Todos íbamos directo al cielo, todos íbamos en el sentido contrario”.
Estas palabras del escritor Charles Dickens, que son las primeras de su novela UNA HISTORIA DE DOS CIUDADES, podrían usarse para describir la apasionante, contradictoria y frágil situación del Club Atlético San Lorenzo de Almagro el 1 de abril de 2012. No es la primera vez que nuestro querido club ha estado contra las cuerdas en lo deportivo, político o institucional… y probablemente no será la última. Nuestra historia siempre ha sido emocionante, y muchas veces convulsa. Seamos honestos: no nos va lo fácil. “Teníamos todo por delante, no teníamos nada por delante…” Esa no es una contradicción. Así es la vida. Lo que siempre tenemos por delante es la posibilidad y la esperanza de crear el futuro que ansiamos como hinchas, como socios, como “cuervos” de ley. Apoyándonos en nuestra gloriosa historia siempre tendremos la elección de exigir lo mejor de nuestro club, lo mejor de nosotros. Es cuestión del punto de vista de uno, de criterios, de códigos individuales y de grupo. Es cuestión de lo que queremos aportar, de ser optimistas o no. Somos lo que imaginamos y lo que hacemos. Seremos lo que queremos ser. Celebramos nuestro cumpleaños número 104 con el orgullo de siempre, capaz que con más orgullo que nunca ahora que estamos sufriendo un poco. Sufrimos juntos, y todos juntos somos San Lorenzo. Seguiremos cantando “…a todas partes voy con vos…” hasta la muerte. Digan lo que digan las demás hinchadas, no hay otra en el mundo que hubiera podido reunir unas 100 mil personas como hizo la nuestra el 8 de marzo para la Restitución Histórica. No hay otra hinchada que sienta los colores como los sentimos nosotros. Es un honor ser miembro de esta gran familia que siempre da la cara y va de frente, que nunca se rinde. Feliz día para todos. AGUANTE CICLÓN CARAJO.
