La sombra de nuestro nombre

Viggo Mortensen y Fabián Casas

(13-21/9/2014)

VIGGO:

Hola Cuervo,

Acá estoy, otra vez mirando el Río San Lorenzo y la frontera que separa a los EE. UU. de Canadá, esa línea invisible, otro obstáculo arbitrario creado por hombres de armas y dinero. He vuelto de Toronto, donde presentamos “Jauja” con un equipito encabezado por Lisandro Alonso que incluyó algunos de nuestros coproductores de México, Argentina, Holanda, Francia, Dinamarca, USA. También estuve en el festival para presentar la película francesa, dirigida por David Oelhoffen, “Loin des hommes”. Nos recibieron bien los espectadores de ambas películas. El público del estreno norteamericano de “Jauja” se rio, aplaudió, y se quedó un rato largo para charlar con Lisandro y conmigo después de la proyección. Muchos hablaron de tu guión, Fabián, apreciando la originalidad de nuestro cuento. Creo que Lisandro está muy contento. Merece el reconocimiento positivo que le está llegando en todas partes. Él se quedó un par de días más para hacer entrevistas y conocer a otros directores. El mes que viene vamos a Nueva York para presentar “Jauja” en el New York Film Festival. Los cineastas del mundo van enterándose cada vez mejor de la singular obra de nuestro amigo Lisandro. ¡Qué bien!

(Lisandro explica lo inexplicable en Toronto)

San Lorenzo juega hoy contra Godoy Cruz. Somos campeones de América, pero vamos últimos en la tabla de equipos de primera división en Argentina. El equipo de Bauza tiene que parar de arrastrarse. Hay que subir al pingo y soltar cadera y riendas ya, tirar para adelante, monte adentro y contra el viento. Queda mucho torneo, y el CASLA debe despertarse. Estoy convencido de que eso ocurrirá, y que tanto en la liga nacional como en la Copa Argentina vamos a poder sorprender para llegar bien al Mundial de Clubes en diciembre. No podemos vivir más de ser campeones de la Libertadores. El nombre San Lorenzo de Almagro es más conocido que nunca por el planeta, pero no podemos vivir del pasado, no podemos vivir de nuestro lindo nombre nomás. Como bien dijo el gran poeta mexicano Octavio Paz:

“Perder nuestro nombre es como perder nuestra sombra; ser sólo nuestro nombre es reducirnos a ser sombra.”

(Lindo, pero ya fue)

P.D.:

Vi la segunda pelea entre el Chino Maidana y Floyd Mayweather. Para mí que Maidana había ganado la primera pelea, así que deseaba ver una revancha que hiciera un poco de justicia. No pudo ser. Para quitarle el cinturón a un campeón, especialmente cuando este lucha en casa, agarrando y esquivando al retador, metiéndole el dedo en los ojos todo el rato -y con un referí muy favorable al boxeador local- hay que ganar por knock-out sí o sí. A pesar de dar pelea, le faltó un poco de agresión al Chino, más movimiento lateral y de cintura. No pudo aprovechar el momento que había generado en su brillante cuarto round. Mayweather es muy piola. Sabe distraer y agarrar, hacer tiempo. El punto que le descontó el referí a Maidana no fue justo, y después tenía que haberle quitado uno a Mayweather por un clarísimo golpe bajo intencional. Es un gran boxeador Mayweather, pero también es muy tramposo. Por eso el Chino necesitaba dejarlo en la lona, pero no pudo. Me dio rabia la parcialidad arbitral del paisano gringo, pero así es el boxeo. Y Floyd supo defenderse. Como dijo Sun Tzu, “Los buenos guerreros hacen que los adversarios vengan a ellos, y de ningún modo se dejan atraer fuera de su fortaleza”. Eso es lo que consiguió en esta pelea Mayweather, pero dudo que se atreva a darle otra oportunidad al toro santafesino. El chino se puede sentir orgulloso. No hizo trampa y atacó sin parar. Como el CASLA que a veces empata o pierde a pesar de jugar al fútbol de ataque, Maidana puede sentirse orgulloso de su valiente esfuerzo. En mi opinión los recursos defensivos de Mayweather, lícitos como ilícitos, no le bastarían en una tercera pelea entre estos dos boxeadores, especialmente si fuera en territorio neutral. A ver si ahora para de esquivarlo a Paquiao. Probablemente no querrá arriesgar sus cinturones y su reino económico el campeón. Creo que el filipino lo liquidaría ahora si tuviera la oportunidad de enfrentarse al norteamericano. El boxeo profesional es un quilombo. Tanto los deportistas como los empresarios tramposos deberían ser obligados a jugar al rugby todos los fines de semana. Ese sí que es un deporte de valientes. Las nenazas no caben. Entre los jugadores que yo he visto jugar al ataque durante los últimos años en el fútbol, Messi, Higuaín, el Pipi Romagnoli, Iniesta, el Beto Acosta, el Pocho Lavezzi, Gonzalo Bergessio y pocos otros son los que juegan al fútbol así -dando todo sin tirarse a la pileta y lloriquear. El Chino también compite así. Comparado con él, Mayweather es un galgo travieso.

(el Chino Maidana)

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FABIÁN:

¡Hola Viggo! Acabo de llegar de Santiago de Chile. Fui porque presentaron un libro nuevo mío y tuve que ir a hacer prensa. Me gusta mucho esa ciudad donde tengo amigos íntimos que me ayudaron en momentos duros de mi vida. Así que siempre es un placer volver ahí. Qué bueno que la película siga su curso, ¿no? Y que vos y Lisandro se hayan encontrado. Yo estuve con una alergia en la piel, me salían ronchas, cosa que me pasó hace varios años mientras escribía la novela de la que saldría después el guión de “Jauja”. Lo que hice en ese momento fue ponerle la alergia al Capitán Dinesen y a mí se me fue de inmediato.

(Capitan Dinesen, cuesta abajo en su rodada)

Ahora estoy terminando una novela que tengo que entregar el año que viene, pero la quiero finalizar antes de que nazca, en diciembre, el nuevo crío. Anita está haciendo cosas con cajas de madera sogas y las pinta y las pega y me las regala, ¡creo que Kevin las aprobará desde el cielo como el nuevo arte bebé! En el hotel, por las noches, vi en la tele que ganamos un partido y que Cauteruccio metió un gol, creo que esto último es clave, hay que recuperar gladiadores.

(Cauteruccio festeja el 2-1)

También vi parte de la pelea de Maidana y me aburrí, tuve la sensación de que nunca, pero nunca, iba a haber un intercambio de golpes, parecía un combate abstracto. En fin, ahora voy a estar viajando los fines de semana para presentar libros y dar charlas: Rosario, Mendoza, Tandil. No veo a Lisandro hace mucho, creo que abandonó la forma humana. ¿Estás con tus viejos?

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VIGGO:

Sí, Cauteruccio hizo un lindo gol. Espero que sea el primero de muchos en este torneo, y en los partidos de copa y del Mundial de Clubes. El otro gol, el que nos dio la ventaja al final, fue fruto de un penal bien cobrado, pero justo justito. El referí podría haberlo ignorado; vio un par de agarrones a Mas, que se dejo caer con el segundo. El Cuervo fue piola, pero el agarrón existió. No cabe discusión, en realidad. No fue como el teatro asqueroso de Fred en el primer partido del Mundial en julio entre Brasil y Croacia, o como los impresionantes y vergonzosos saltos desde el vacío al vacío de Robben en ese torneo. La falta existió; fue una jugada estúpida de Zuqui. Un agarrón, bien, dale, pero el segundo, más explícito, fue una boludez que mereció su castigo. Y, claro, Ortigoza convirtió porque casi nunca perdona desde los once metros. Romagnoli jugó muy bien, y fue el ingeniero, indirectamente, del gol de la victoria con su gran pase al centro del área, además de crear varias otras oportunidades para sus compañeros ante el Tomba. El Pipi está en muy buena forma. Creo que San Lorenzo puede encadenar de a tres por un rato, y volver a la cima de la clasificación.

(Los once contra Godoy Cruz, 13/9/2014)

¡Qué bien que hayas estado en Chile, y que estés escribiendo cosas nuevas! Lisandro está en Nueva York. Le dieron una beca, una especie de residencia artística durante un mes y pico en el Lincoln Center. No sé si le toca hacer de profesor, creo que solamente tiene que escribir un nuevo guión, hablar un poco de cine y no sé qué más. Dentro de una semana lo veré para presentar nuestro cuento, el tuyo y el nuestro, en el Festival de San Sebastián en el País Vasco, y en tres semanas lo veré de nuevo en Manhattan para presentar a “Jauja” en el New York Film Festival. Cuando se nombra el País Vasco, siempre pienso en la gran leyenda del CASLA, Isidro Lángara Galarraga. Jugó en Boedo durante la Segunda Guerra Mundial. La directiva de San Lorenzo lo vio jugar a Lángara y lo quiso contratar cuando hizo una gira sudamericana durante la Guerra Civil española con el equipo vasco, la Selección de Euzkadi. Boca Juniors y otros equipos argentinos lo querían contratar, pero el CASLA tuvo la suerte de atraerlo. Uno de los mejores negocios en la historia del Ciclón. En su partido debut en 1939, le metió cuatro goles en poco más de media hora a River Plate en el Viejo Gasómetro. Terminó marcando 110 goles en 121 partidos con la remera azulgrana. Ya era un veterano cuando vino a Buenos Aires, del fútbol y de la Guerra Civil, en la que peleó como soldado de la República contra el ejercito fascista de Franco. Había jugado 220 partidos oficiales con el Oviedo en la Liga española, ¡metiendo 281 goles! Jugó con varias figuras Cuervas durante su etapa argentina, quizá la más grande  fue el joven Rinaldo Martino, que luego fue el tremendo goleador de nuestro gran equipo campeón de 1946. Por algo lo llamban “Tanque” y “Dinamitero”. Tenía un tiro brutal, y nunca bajaba los brazos, jugaba como una bestia todo el partido. Un toro. Nos vendría bien ahora un jugador como Lángara, implacable, forzudo, astuto -un poco como Bergessio cruzado con el Gringo Scotta. Cauteruccio puede ser ese jugador. A ver…

(El Vasco Lángara)

Ahora hay que pensar en el partido de Octavos de la Copa Argentina. Franco en el arco, y algunos otros cambios que me ponen nervioso. Como cuando Pizzi cambiaba el equipo todo el rato para cuidar el torneo local. No me gusta nada, hay que ir a por todo en cada partido, cada momento es un desafío, cada encuentro debe entenderse como una final. El equipo titular no está engrasado todavía. Desde que San Lorenzo ganó la Libertadores ha mostrado destellos de calidad, pero en general hay mucho humo y poca llama en el juego colectivo del Ciclón. No hay que confiarse ante Defensa y Justicia. Esta copa la deberíamos ganar, pero hay que hacerlo por el suelo, pase por pase, jugada por jugada. No importa lo que fue y lo que se viene. Ahora este partido y nada más.

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FABIÁN:

Mañana jugamos por la Copa Argentina y debuta, como decís, Franco en el arco. Parece que Bauza va a empezar la rotación. El fin de semana hay un lindo partido: Independiente-River. Independiente se armó después del clásico que le ganó a Racing y con más intensidad que fútbol está a un punto de los dirigidos por el “Hombre Araña” (le digo Hombre Araña porque, jugando un súper clásico, Gallardo arañó desde el piso a “Abandonacieri” en la cara (le digo Abandonancieri porque después de un golpe mínimo el arquero de Boca se bajó de un partido clave con la selección que le ganaba a Alemania 1 a 0 en el Mundial de Alemania: el Che Guevara lo hubiera fusilado). Creo que el River de Gallardo juega muy bien. Ataca y defiende replegándose con la precisión que tiene un vientre de una acordeón para moverse en todas las líneas y producir música. Los equipos que lo enfrentaron (como nosotros) tuvieron que hacer un desgaste tremendo para poder estar de igual a igual. Gallardo le puso dinámica y ataque, es de vocación ofensiva y aún sin Teo Gutiérrez, la rompió. “Cracknevitter” (no es necesario explicar por qué le digo así) me parece un Mascherano sin sobreactuación, como si fuera Daniel Day Lewis sin los tics que le hacen ganar el Oscar invariablemente. Te escribo después del partido.

(El Muñeco DT de hoy, y el de ayer cazando Paxto)

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VIGGO:

Hermano, si querés por favor dame tu impresión de la derrota. Yo casi no quiero decir nada. Me dio asco mucho de lo que vi. La rotación no fue buena idea, pero eso es lo de menos. Lo malo para mí fue la falta de puntería y los pelotazos, la ausencia del característico buen juego de equipo que se armó con tanto esfuerzo e inteligencia durante el último año y pico. San Lorenzo anda muy perdido, y hay que levantar cabeza. En muchos momentos quedaba claro que San Lorenzo era un equipo superior, con el claro potencial para golear al valiente y bien organizado Halcón de Darío Franco, pero no hizo nada. Golazo de Cauteruccio, un par de buenas jugadas de ataque, y nada más.

(Darío Franco)

Y los Cuervos pelotudos que dispararon contra los hinchas de Huracán en Avenida Caseros después del partido no deben entrar nunca más en nuestra cancha ni en una sede del CASLA. Criminales, amargados, basura humana. Eso no es San Lorenzo. Basta ya. Nuestro presidente tendrá que tomar la iniciativa para que esto se frene, al menos con respecto a nuestro club y, si puede ser, el barrio que compartimos con los primos quemeros. Creo que Matías Lammens de verdad quiere marcar una diferencia en lo de la violencia.

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FABIÁN:

Hola Viggo: no pude ver el partido porque fui a una clase de karate que necesitaba mucho. Pasa que nos estamos mudando de casa, vamos a alquilar la nuestra y nos vamos a ir a una que ya señamos para que esté cerca del colegio nuevo de Anita, de mi trabajo y de bosques para que corra Rita. Todos estos malditos trámites -garantías, papeles, arreglos para la nueva casa, etcétera- me están liquidando y por eso aprovecho a ir al Dojo para sacarme la cresta -como dicen los hermanitos Chilenos- y parar la máquina de pensar en Gladys. Hoy me levanté muy temprano para ir a discutir una infracción de tránsito que me querían engrampar y después, cuando estaba tomando un café en un bar, leí que habíamos perdido. Agradecí a Sensei Funakoshi (el poeta japonés que organizó los golpes de karate y lo difundió) que no pude ver el partido porque me hubiese amargado mucho. Lo único que resalto es que Caute metió su segundo gol. Parece que Bauza tiene un trabajo intenso por delante. No sabía lo de los barras, ese es un flagelo que, sin una decisión política fuerte, es imposible de sanear. Creo que si esto sigue así en el futuro no se va a jugar nunca más fútbol con gente en la cancha, es más, creo que en el futuro lo único que se va a jugar es playstation y ahí va a seguir reinando Cristiano Ronaldo, ya que está diseñado para eso. En los 40 minutos que tuve de espera para hablar con el juez vial de mi infracción de tránsito, escribí un capítulo más de la novelita que estoy cocinando. ¡¡¡No te olvides que somos los campeones de América!!!

(Sensei Funakoshi)

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VIGGO:

¡Eso no lo olvidaré nunca, Cuervo! Eso no me lo quita nadie. We are the champions, my friend. Mañana volvemos a jugar contra Defensa y Justicia en el torneo local. A ver si conseguimos un poco de revancha después de ser eliminados por ellos en la pelea por la Copa Argentina, pero espero que San Lorenzo juegue templado, sin rabia. Una victoria profesional -convincente y merecida- es lo que le hace falta al Ciclón a estas alturas.

Me alegra saber que volviste al karate. Justo en Toronto estábamos hablando Lisandro y yo de eso, preguntándonos si seguías con las sesiones matutinas en tu dojo. Funakoshi es una gran figura en la poesía y en las artes marciales. El guerrero virtuoso detrás del estilo unificador llamado Shotokan. Cuando mi hijo Henry tenía unos 6 ó 7 años empezó a estudiar el estilo Shotokan en California. Yo también lo hice durante un par de años. Me gustó la tranquilidad que sentía después de las sesiones en el dojo. Nunca llegué tan lejos como Henry, a causa del laburo en el cine que me llevaba a todas partes, o como vos que ya te estás acercando a la cima de esta disciplina deportiva/filosófica japonesa.

Acabo de llegar a San Sebastián. Mañana presentamos a “Jauja” en este lindo festival en el noroeste de la Península Ibérica. Al llegar a nuestro hotel había mucha gente afuera. Saludé brevemente y entré. No sé por qué había tanta gente. En el lobby vi varias caras conocidas del cine internacional, y entonces entendí que era una tarde de muchos arribos, mucho quilombo mediático. Después de tomar un trago en el bar del hotel con Lisandro y sus padres, que están de gira turística por Francia y España, y que vienen a nuestro estreno, estoy acá en mi habitación escribiéndote. Acabo de ver la segunda parte del Manchester City-Chelsea. El equipo del Ingeniero Pellegrini, campeón de la última temporada de la Premier League, iba perdiendo 0-1, y Mourinho escondía bastante mal su evidente satisfacción. En el minuto 85, el eterno luchador Frank Lampard, que recién había entrado a la cancha para el City, hizo el gol del empate. Minutos después casi metió el 2-1. Lampard es un jugador legendario en Inglaterra, un hombre que ha sufrido y triunfado con su selección nacional, en la Premier y la Champions. Es el máximo goleador histórico y el implacable líder moral del Chelsea, que sin embargo fue descartado por el DT portugués y la directiva de Stamford Bridge después de la última temporada. El partido terminó 1-1, con Lampard siendo la figura a pesar de sus pocos minutos, y el City llevándose la victoria psicológica. Veremos si a largo plazo la venta de Lampard resulta ser tan preocupante para el Chelsea como la de Di María para el Real Madrid o la de Diego Costa para el Atlético de Madrid, pero este soldado veterano ya volvió a escribir su nombre en la historia del fútbol inglés. Es una lástima que Mourinho no tomó el gol de Lampard como un guerrero virtuoso. Sus comentarios mediáticos acerca de su ex jugador después del partido fueron poco elegantes. No me sorprendió eso, saliendo de la boca de un hombre rico, exitoso, pero auto-condenado a la más vil y desgraciada amargura.  Mourinho casi siempre pierde, independientemente del resultado oficial del partido.

(El eterno guerrero iguala, pero no celebra el gol ante su ex-equipo)

P.D.:

Es interesante que nuestro cuento ya forme parte de la historia cinematográfica de Dinamarca, y que también tenga un vínculo histórico con la literatura de ese país. Cuando leí tu guión hace tres años, y vi que mi personaje tenía el nombre provisional ‘Capitán Blixen’, les sugerí a vos y a Lisandro que para mis conciudadanos de la tierra de Isak Dinesen, seudónimo de la escritora Karen Blixen (nacida Karen Dinesen), tal vez sería más relevante e interesante darle al personaje el nombre del padre de la escritora. El Capitán Wilhelm Dinesen luchó en la guerra de 1864 contra los alemanes, al igual que nuestro personaje,’Gunnar Dinesen’. Wilhelm fue un hombre muy culto, hijo de la burguesía y un escritor reconocido, pero a la vez, como nuestro ingeniero campesino, un aventurero en el Nuevo Mundo -Wilhelm en Norteamérica y ‘Gunnar’ en Sudamérica. Si no los leíste, los libros de Wilhem son muy interesantes. No sé si fueron traducidos al castellano, pero existen en inglés. Te los puedo prestar si querés leerlos. Además, recién publicaron una buena biografía del Capitán Wihelm Dinesen, escrita por Tom Buk-Swienty, el que ya escribió varios libros sobre las guerras de 1848 y 1864 entre Prusia y Dinamarca, en las que también participó nuestro personaje. La medalla de servicio militar que ‘Dinesen’ lleva en “Jauja” fue otorgada a partir de 1877 por el Rey Christian IX a unos 3.000 mil soldados daneses que habían participado en ambas guerras. Como saben, la encontré en Copenhague poco antes de nuestro rodaje, donde también conseguí el uniforme, el telescopio y el sable de nuestro capitán -todos de la misma época. A saber cuál fue el soldado que ganó esa medalla que usamos en la película… Como en nuestro cuento, el tiempo y los hechos históricos de la raza humana se enredan, se confunden y desaparecen en la infinidad de los universos.

P.P.D.:

Además de ser un gran jugador de fútbol, Lampard es muy inteligente. Su C.I. (Coeficiente de Inteligencia) es más de 150, lo que lo pone entre los genios del mundo. Cuando era pibe, siempre sacaba notas perfectas en latín, por ejemplo.