Viggo Mortensen y Fabián Casas
(26/9-5/10/2015)
VIGGO:
26/9
Julio Buffarini es un jugador que ha estado en la mira de importantes clubes internacionales desde hace un par de años, tanto en Brasil como en Europa. La verdad es que yo esperaba que se fuera antes del final del presente torneo de Primera División, como lo habían hecho otros miembros destacados del San Lorenzo Campeón del Torneo Inicial 2013 y la Copa Libertadores 2014. Teniendo ya 27 años, sería lógico que diera el salto y aprovechara la oportunidad para ganar un poco de dinero y enfrentarse a nuevos desafíos como futbolista. Pero no, ayer firmó para tres años más con San Lorenzo. Tal como Tévez nos sorprendió al volver a Boca Juniors cuando está en plena forma como deportista, Buffa sorprende quedándose en Boedo. Quizá le sigue inspirando el sacrificio que hizo el Pipi Romagnoli al rescindir su contrato en Brasil para quedarse a jugar la Libertadores y más. Desde luego que las palabras del brillante lateral derecho cordobés sobre lo difícil que será para el equipo ganar el campeonato, y las ganas que tiene de darlo todo, son una muestra más de su compromiso con el CASLA: “Si hay que empujar el auto, lo hacemos”, dijo, en referencia a las lesiones y el cansancio del plantel a estas alturas del campeonato.
Mi hermano Carlitos me envió esta linda foto del norte del estado de Idaho, donde él vive con su familia, y donde yo vivía antes de mudarme a Madrid. Buena señal para el partido de hoy en Victoria. ¡Vamos San Lorenzo, carajo!
Estoy en el aeropuerto de Atlanta. Esta noche vuelo a Barcelona y después viajo a Madrid, ciudades donde tengo que hacer los últimos días de promoción para la peli francesa “Loin des hommes” junto a su director David Oelhoffen. Tengo dos horas de espera, durante las cuales veré el partido contra Tigre. Pensando en Albert Camus, autor del cuento que inspiró la película, recuerdo algo que él dijo una vez, una frase que habré citado en esta columna en otra ocasión antes de un partido de San Lorenzo: “La verdadera generosidad hacia el futuro consiste en dar todo al presente”. O sea, espero que el equipo tenga hoy la mentalidad de un guerrero valiente e inteligente, que se mande al frente para recuperar el primer lugar en el torneo de Primera.
Acabo de enterarme de la lesión de Lionel Messi. Mala suerte. No soy hincha de su equipo, pero este jugador trasciende fronteras, es más grande que cualquier escudo. Durante los dos meses que dicen que estará recuperándose voy a extrañar sus jugadas geniales, su astucia táctica, el placer que me da verlo moverse en la cancha. Merece el Balón de Oro la Pulga, pero ahora a ver si mete un montón de goles CR7 y cambia la cosa. Igual todo eso de los reconocimientos mediáticos es tan podridamente político como los Óscares y los Premios Nobel -como las maniobras vinculadas a cualquier premio, en realidad. Seguro que a Jorge Bergoglio le importa un carajo todo eso. Pero me imagino que el Papa se enojó como yo y todos los Cuervos del mundo cuando San Lorenzo empató con Tigre. Acabo de ver el gol de Rincón, un cabezazo cruzado que lo dejó atónito a Torrico. Y a mí. Pero se vio venir este resultado. Bauza intentó proteger el 0-1 y la cagó. ¿Qué decir? Pasaron otras cosas también, como siempre. El gol que falló Elizari fue de un malabarismo nefasto que no se explica. Era muy difícil no meter la pelota en el arco desde ahí. La amonestación hecha por el frecuentemente mediocre -y muchas veces escandalosamente injusto- referí Néstor Pitana a Barrientos fue muy dudosa. Se podía ver claramente que no hubo mano, que el jugador paró la pelota con el pecho. El resultado de esa amarilla es que el Pitu se pierde el próximo partido, un encuentro clave contra Central. Eso sí, el centro de Buffarini para el gol de Cauteruccio, a comienzos de la segunda mitad, fue perfecto, una jugada hermosa que parecía devolverle la punta a San Lorenzo. Pero no, otra vez, después de hacer un gol, Bauza metió el equipo atrás a proteger el resultado y quizá buscar algún contraataque. Y otra vez pagó muy caro el equipo la estrategia de cederle el medio campo al rival. Lo de apostar por un juego agresivamente ofensivo puede resultar igual de peligroso que la estrategia defensiva que emplean técnicos como Bauza cuando tienen una ventaja mínima en el marcador, pero yo prefiero que el equipo juegue a la ruleta de frente, con la prioridad de meter más goles. Si ahí perdés al menos podes irte de la cancha seguro de que intentaste ganar el partido. Así de sencillo.
Si Banfield no le gana a Boca mañana la posibilidad de festejar en la esquina de San Juan y Boedo en noviembre se reduce dramáticamente. Que pierda la Bosta mañana nomás. Sabemos que ser hincha del Ciclón suele ser una obsesión con poco premio muchas veces. Aparte del orgullo que conlleva el hecho de ser Cuervo, hay que tragar muchas decepciones. Y, claro, eso les pasa a todos los equipos, a todas las hinchadas. Tenemos que disfrutar de los buenos tiempos y aguantar las horas jodidas con la misma frialdad, si cabe. Como decía el prusiano Carl von Clausewitz, “La guerra implica un esfuerzo físico y un sufrimiento”, y para no verse desbordado por esas cosas hay que nacer fuerte o hacerse fuerte. No hay que sucumbir a la desesperanza, hay que pelear siempre. Bauza recién dijo en una entrevista que “vamos a pelear hasta el final”. Me parece linda la frase, pero creo que él quiere decir “vamos a defender hasta el final”. Pelear, para mí, significa atacar. El Patón es un tipo simpático con mucha experiencia y dos Libertadores ganadas, pero si imaginamos que San Lorenzo es un pingo de carrera y el D.T. su jinete, el animal ya tendría la boca destrozada de tanto ser frenado. Sigo creyendo que podemos salir campeones en este torneo. Rincón es, de momento, la imagen de nuestro dolor y el foco de nuestra frustración. Pero estas molestias se sanarán con el tiempo y, tal vez, con resultados propicios en lo que queda del torneo. En todo caso, el problema del CASLA hoy no fue Rincón, sino la timidez de su entrenador.
27/9
Boca 3-Banfield 0.
28/9
Bueno, ya está, la cagamos según nuestro D.T. Después de la victoria de Boca contra Banfield dijo: “Yo creo que la diferencia que sacó Boca es irremontable”. ¿Eso es ser un líder, eso es inspirar a los jugadores que tenés maniatados en la cancha con tus tácticas ultraconservadoras? Impresentable.
29/9
Liga Champions: Casillas y su Porto 2-Mourinho y su desastre de equipo de lujo 1.
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FABIÁN:
30/9
Hola Viggo, una pena, sí, aunque matemáticamente estemos cerca, es difícil sacarle el campeonato a Boca y yo creo que el único que viene entonado y con el tanque lleno es Central, pero si no, nosotros le ganamos, lo liquidamos. Bauza fue bastante realista y acá lo están liquidando. Después salió a decir que no era para tanto, que va a pelear hasta el final. Me encanta la frase esa de “si hay que empujar el auto, lo empujamos”, pero de alguna manera habla de la situación del equipo. Está sin nafta, sin opciones pero con una gran potencia y amor propio. Yo creo que eso nos va a mantener a flote hasta el final. Y Ortigoza, no te olvides de Johnny.
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VIGGO:
1/10
Seguro que el amor incondicional y el eterno optimismo que siento por San Lorenzo a veces me ciega con respecto a ciertas realidades. Entiendo lo que decís de Bauza, que quizá está hablando con los pies en el suelo y la mente fría, pero a mí, si yo fuera el D.T., el presidente o el capitán del CASLA nunca en la vida, nunca en ningún momento hasta que estuviéramos matemáticamente fuera de la lucha por el campeonato se me ocurriría decir que la diferencia que nos puede haber sacado cualquier equipo del mundo es “irremontable”. NUNCA. Primero porque no es verdad -“It ain’t over till it’s over” (“Esto no se acabó hasta que se acabó”), como dijo la gran leyenda del béisbol americano Yogi Berra -, y segundo porque eso no lo dice ni lo transmite de ninguna manera gestual o mental ningún buen líder.
Hasta yo estoy harto de mis repetidas advertencias y denuncias en contra del estilo conservador que lleva a entrenadores como Bauza a defender mínimas ventajas en el marcador a base de hacer replegarse al equipo y pedirles a los jugadores que solamente se manden al frente (a medias) en el caso de un buen contraataque. No creo que vaya a cambiar mi manera de ver el fútbol en ese sentido, sean los que sean los resultados del CASLA. Siempre me han gustado las versiones de San Lorenzo que atacaban con todo, que han jugado como si los dirigiera Cruyff, jugando al todo o nada.
Acabamos de presentar en Madrid la peli “Lejos de los hombres”. Como en España y el resto del mundo fuera de Francia entienden el gran valor artístico, filosófico y humanista de la obra y la persona de Albert Camus, se nota que el público y los medios han mirado nuestra película con los ojos abiertos -y parece que la reacción positiva al trabajo de David Oelhoffen acá está siendo bastante unánime. Mañana se estrena en unas 45 salas del país, una cantidad de pantallas muy alta para este tipo de película y su distribuidor modesto pero muy inteligente, la compañía La Aventura. Anoche hubo un preestreno en Madrid. David y yo la presentamos e hicimos un coloquio. Tuvimos buenas conversaciones con el público, incluso con un señor argelino al que le encantó la película y que se había quedado muy emocionado. Después estuvimos en casa hablando y tomando whisky hasta las cinco de la mañana. Hablamos de la peli, de Argelia, de Camus, del Real Madrid, de San Lorenzo, de Cristiano Ronaldo, de Mourinho, del “Pocho” Lavezzi, de Antoine Griezmann, de la importancia de Messi, del Paris St. Germain, del Mundial de Rugby, de nuestros padres e hijos, del terrorismo, de la vieja Yugoslavia, de Hitler, de los problemas que tienen las pelis y las novelas originales para ser distribuidas y llegar al público hoy en día, de Edgar Allan Poe, de los independentistas catalanes, de la obra y la personalidad pública de Alfred Hitchcock, del gran dictador y general militar Napoleón Bonaparte y otras personas complicadas e influyentes. Y de tantas cosas más. Pensé en vos, que nuestra larga y variada conversación era como algunas de las nuestras. Te extraño Cuervo, estoy pensando en vos y tu familia ahora en el tren a Barcelona, donde presentaré solo a “Lejos de los hombres” un par de veces más este finde, con coloquios incluidos.
Me escribió Daniel Ortiz, un amigo argentino que vive en Los Ángeles donde ayuda a Perceval Press con algunas traducciones y en su capacidad de corrector de textos en castellano, incluso esta columna. Es hincha del Tomba, y sabe mucho de fútbol. Me dijo que tiene una remera del CASLA que se pone a veces cuando juega al fútbol con amigos cerca de la playa. Se la pone porque le entusiasma leernos y porque lo que va aprendiendo de la historia, la mitología y los valores de nuestro club le inspira. O sea que es un poco Cuervo. Nunca dejará de ser hincha de Godoy Cruz, y tampoco se lo pediría nunca, pero nos apoya a su manera. Lindo, ¿no?
Otras frases asombrosas del genio Yogi Berra, quién ganó muchos campeonatos y fue uno de los jugadores más grandes en la historia de los New York Yankees, fueron “Mejor cortá la pizza en cuatro pedazos porque no sé si puedo comer seis”, y “Si no sabes adónde vas, podés terminar en otra parte”. Tuvo miles de pronunciamientos de ese tipo de Zen alucinógeno. Otras que recuerdo son “Cuando llegás a un cruce de caminos, tomalo” , “Esto es dejà-vu otra vez”, “Nunca contestés una carta anónima”, y “El futuro no es lo que era”. Ha sido el equivalente del Bambino Veira en los EE.UU. Que en paz y al eco de nuestras risas descanse.
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FABIÁN:
2/10
Hola campeón: a partir de mañana Guada se va diez días a Chile y me quedo solo con los niños, estoy peor que Bauza. ¿Juego a la defensiva o a la ofensiva? Es decir que tengo que hacer todas mis cosas cotidianas pero a eso sumarle toda la parafernalia de la vida intensa de padre. Le ruego a Ballard que me ayude.
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VIGGO:
2/10
Estoy seguro de que sobrevivirás, hermano. Hay una cita de Ballard que me gusta mucho:
“Me gustaría resumir mi temor sobre el futuro en una palabra: aburrimiento. Y ese es mi único temor, pensar que todo ya ha sucedido, que ya nada nuevo, excitante o interesante va a surgir…”
Lo cierto es que ni vos ni yo nos estamos aburriendo.
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FABIÁN:
2/10
Pensaba en Ballard porque él se quedó con los niños para siempre cuando su mujer murió en unas vacaciones. Hay una foto genial de él, con los niños cambiados, impecables, en su casa. Y escribió miles de novelas mientras los criaba. Un maldito genio.
Mañana estoy programando el día de mis niños para tener un momento solo para ver el partido con Central. Creo que el CASLA va a ganar.
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VIGGO:
3/10
Totalmente de acuerdo, hermano. Como los Canallas y los Cuervos saben que un empate no les sirve mucho, será duro el partido. Creo que podemos ganarlo y meterle presión a Boca. Si San Lorenzo gana y la Bosta cae insólitamente ante Crucero, ¡la que se va a armar!
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FABIÁN:
3/10
Vengo cruzando mails con Calamaro sobre la tauromaquia; él es defensor de esa práctica y yo le digo que sí la defiendo siempre y cuando gane el toro. Me parece que el toro lleva las de perder, no es de igual a igual. ¿Vos que decís?
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VIGGO:
3/10
Bueno. No pudimos ganar, pero tampoco perdimos el partido. Lo que se aleja es la posibilidad de ser campeones, aunque no me rendiré hasta que sea matemáticamente imposible. El equipo jugó muy bien. Incluso Mas -que se equivocó seriamente en pases de salida y también fue un poco morfón en el área rival- hizo algunas cosas bien y corrió como loco. Dio un buen pase de gol a Blanco para el 2-2. Nunca se achicaron los jugadores, fueron valientes y buscaron el gol todo lo posible, pero otra vez Bauza los mandó a defender la ventaja mínima del 1-0 por un buen rato en vez de dejar que siguieran jugando al fútbol ofensivo. A pesar de eso, no voy a decir esta vez que se nos fue la victoria porque el D.T. fue demasiado conservador (los jugadores no le hicieron tanto caso esta vez; de verdad parecían saber que tenían que jugar al ataque sin piedad para ganar), o que el referí nos robó por no pitar el claro penal contra Rolle y otro a Cauteruccio. La verdad es que tuvimos las de ganar y simplemente no pudo ser. Fue un partido de igual a igual. Los dos equipos dieron batalla tanto defendiendo su arco a muerte y armando jugadas de ataque como repartiendo patadas y codazos, y los dos se quejaron sin parar. Todos querían ganar, y nunca pararon de intentarlo por todos los medios. Este San Lorenzo fue bravo y jugó con mucha pasión. Así me gusta siempre, aunque perdamos. Blanco estuvo tremendo del principio al fin, pero claro que se cansa, como Villalba y Cauteruccio (que deberían jugar siempre bien adelante), cuando tiene que subir y bajar la cancha entera todo el partido gracias a la táctica de su D.T.
Torrico estuvo de nuevo grande, sacándole dos goles seguros a Montoya. No pudo hacer nada en los dos goles de Ruben. Buffarini estuvo enorme, corriendo mil kilómetros, cortando jugadas del rival y compensando los errores de sus compañeros, subiendo en ataque una y otra vez buscando cualquier manera de ganar el partido. A Romagnoli se lo extraña mucho. El Pipi los hubiera ayudado a Buffarini y a Mercier a jugar mejor y no tener que hacer tantas cosas, correr tanto. Caruzzo la cagó en el penal a Ruben, y más con sus airadas y estúpidas protestas. Yepes jugó bien, pero también se pasó con sus lloriqueos.
Hay que acordarse de jugar en vez de ser nenazas e intentar condicionar al árbitro. Pero también lo dejaron solito a Matías contra el goleador del torneo sus compañeros defensores. Casi tuvo que bajarlo a Ruben como si fuera una ternera. Casi. Penal bien cobrado por el línea. Lástima que Elizari no pudo jugar el partido entero, porque estaba enchufado.
Queda torneo. Espero que los de Misiones den la sorpresa hoy contra Boca.
Lo de los toros es complicado. He visto hacer cosas increíbles, con una valentía tremenda, a varios matadores españoles, incluso después de cornadas serias. Pero entiendo la lástima que da ver sufrir al animal. Especialmente cuando los toreros lo hacen mal y prolongan el sufrimiento. Para mí que si uno come carne o pescado no tiene tanto derecho moral a criticar las corridas de toros. Si uno no participa de ninguna manera en la matanza de animales y peces, quizá tenga más autoridad a la hora de criticar el antiguo y violento pasatiempo ibérico. No sé. En todo caso, los seres humanos son de lo más perverso. Luego podemos hablar más de esto si querés. Ahora mismo estoy luchando contra la mezcla de orgullo y depresión que me trajo el empate contra el Canalla.
P.D.:
4/10
Es la una y media de la mañana acá en España. Boca está jugando muy mal, pero gana 1-0, contra un Crucero muy corajudo al que le robaron un clarísimo penal cometido por el Cata Díaz. Vergonzozo lo de Boca en este encuentro con el colista del torneo. Quedan un par de minutos en el partido. El gol fue un autogol. Si Boca juega así contra Racing, Tigre y Central puede perder 9 puntos seguidos. Todavía puede ser campeón San Lorenzo.
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FABIÁN:
4/10
Hola Viggo. Acá es domingo a la noche. Ayer vi el partido hasta el dos a uno de Central. Me pareció que cada uno jugó a su manera y dieron un buen espectáculo. San Lorenzo por las bajas está muy disminuido y fue una pena, como decís vos, que tuviera que salir Elizari. Estaba jugando muy bien de ariete, abasteciendo a los delanteros. No sé, el Ciclón es un equipo duro y va a dar pelea hasta el final. Como vos decís a Boca le quedan dos partidos chivos, Racing y Central. Hay que esperar, pero la diferencia -un término de Jacques Derrida- es enorme. Ayer, por la tarde, antes del CASLA, vi la nueva “Mad Max”. Me pareció tremenda. Es como una furiosa canción de Nirvana, casi no necesita subtítulos porque no hablan y tiene una plasticidad descomunal. ¿La viste?
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VIGGO:
5/10
Me desperté pensando en lo que podría haber sido, aunque normalmente no suelo caer tanto en la trampa de hacerme prisionero del pasado. El torneo se torció cuando perdimos contra Huracán. Y después Tigre. Tampoco debimos perder contra Aldosivi en la fase inicial del campeonato, cuando teníamos un plantel sano y más amplio. Todas esas derrotas fueron, a mi ver, culpa de la táctica de arrancar los partidos tímidamente asegurando primero el empate y, si hacíamos un gol, protegiendo la ventaja mínima con un dibujo muy defensivo, esperando el contraataque. De esa manera, durante casi todo el torneo, los tuviste corriendo a los delanteros de un lado a otro, cansándose y, a veces, lesionándose. No es la manera de meterle al equipo la costumbre de construir el momentum desde atrás para adelante. El tren de impulsión necesita que haya ruedas adelante todo el rato, no solamente atrás. Lo dije muchas veces: además de odiar ese estilo poco vistoso de achicarse en una postura defensiva y especuladora, me parece que la mitad de las veces o más terminás, de esa manera, empatando o perdiendo partidos ganables. Así le fuimos regalando el torneo a Boca o al que quisiera pelearlo.
También pensé en el planchazo del Cata Díaz a Lechner. Hubiera sido la quinta amarilla del Bostero, además de ser un clarísimo penal. ¿Cómo puede ser que no se pite esa infracción? Ese tipo de arbitraje sospechoso se ha visto antes. Es injusto. Pero no solo pasa con Boca. Creo que el nivel de referís es bastante malo en general.
En todo caso, no es por eso que estamos a seis puntos de Boca; es, repito por enésima vez, por haber regalado varias victorias y muchos puntos durante el torneo con una estrategia miedosa en vez de jugar a ganar siempre. Así también perdimos la oportunidad de llegar a la final de la Copa Argentina. Si Boca se lleva esa copa y el torneo sería absurdo, con el equipo tan malo que tienen. Ni con Tévez juegan bien. Hay que decir que Arruabarrena también es un D.T. muy torpe y poco valiente. Sigo pensando que si ganamos los tres partidos restantes y Boca pierde dos de los suyos podemos ser campeones.
Sí, vi la nueva entrega de la serie distópica de George Miller. La vi en un avión mientras escuchaba un disco del genial pianista Bill Evans. O sea, sin sonido, como vos decís que se podría ver. Las imágenes del desierto australiano y las caras y cuerpos de los personajes son hermosamente grotescos. Las ninfas del equipo del personaje de Charlize Theron son unas amazonas nórdicas impresionantes. Te paso un video de Bill Evans tocando en vivo una de sus más lindas canciones, “Waltz for Debby”:
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FABIÁN:
5/10
Hola, Cuervo, es lunes por la mattina. Acabo de tomar mates y leer los diarios. Julián habla solo, por ahora, en la cuna, y Anita duerme profundamente. Rita está a los pies de esta mesa donde te escribo. Che, yo creo que Central debería ser el campeón, va siempre al ataque, no para nunca, juega con gracia, disciplina y no termina ganando partidos como nosotros y Boca -lo de Boca ayer fue un papelón. Sé que las matemáticas y el fútbol no se llevan bien, fijate a Holanda en el ’74, esos hermosos perdedores.
Lo que le reconozco a San Lorenzo es su insistencia, su dureza a pesar del poco fútbol, sus ganas. Estos tipos nos dieron un campeonato y la Libertadores, no es menor. El problema es que el fútbol vive furiosamente del presente, ¿no? San Lorenzo tiene, a priori, el fixture más accesible, Boca el más complicado. Padre e hijo, como la canción de Cat Stevens.
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VIGGO:
El amigo Daniel me envió esto sobre ese gran equipo holandés del ’74 al que te referís (la famosa “Naranja Mecánica”), escrito por Julio César Pasquato (“Juvenal”). Viene de los archivos del diario colombiano El Tiempo, de 1994:
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-114448
EN EL 74, HOLANDA Y SU FÚTBOL TOTAL
Por: JULIO CESAR PASQUATO
21 de abril de 1994
En 1966, Inglaterra incorporó a la historia del fútbol un concepto nuevo, que ya sería inamovible como factor de dominio y de victoria: la dinámica colectiva.
Brasil le agregó en 1970 el toque suramericano de la habilidad y la inspiración de sus intérpretes. Y en 1974 aparecieron los holandeses que comandaban Rinus Michel en la dirección técnica y Johann Cruyff dentro del campo, con una propuesta tan novedosa como espectacular.
Habían estado ausentes en la Copa del Mundo desde su efímera participación en Francia 1938 y su retorno a los Mundiales fue explosivo, ya que no obstante perder la final de Munich frente a otro gran equipo, el de Alemania Federal, fueron la sensación de 1974.
Holanda incorporó a la dinámica de los ingleses, matices realmente novedosos.
Así, por ejemplo, los marcadores de punta de Inglaterra subían y bajaban por las rayas laterales en desplazamiento mecanizado de sentido exclusivamente longitudinal y los mediocampistas se desplazaban por sus callejones habituales, salvo algunos cruces que intentaba Alan Ball desde su posición de puntero derecho retrasado.
Los encargados de rotar constantemente eran los delanteros de punta, cruzándose entre sí o abriéndose a los laterales para dar lugar a la subida de Bobby Charlton por el centro. Los holandeses le agregaron el movimiento de quienes no tenían la pelota, en permanente rotación circular.
Como Inglaterra 1966 o Brasil 1970, Holanda partía de una formación base de 4-4-2 con estas nítidas diferencias: 1) hacían defensa mixta entre zonas y hombre, tomando al adversario en marca cerrada pero en zona; 2) empleaban el batidore libero a la manera europea continental, como hombre excedente a espaldas del resto de sus compañeros; 3) ese líbero o quienes hacían marca en zona, no eran fijos; rotaban permanentemente según las circunstancias del juego pero sin alterar nunca el sistema del equipo; 4) cuando el arquero o un compañero rechazaba el balón, dos o tres holandeses iban inmediatamente sobre el adversario que la recibía, para apretarlo y recuperar su posesión; era el concepto del pressing , que ellos hacían en toda la cancha para controlar siempre la iniciativa.
5) Como resultado de esa presión achicaban terreno hacia delante desde el fondo de su defensa y provocaban el off side de los rivales adelantados; 6) cuando conseguían la pelota, pasaban al ataque con velocidad y determinación, cubriendo el ancho del campo con hombres destapados contra las rayas laterales.
Ese era el fútbol total que los holandeses exhibieron ante el mundo en la Copa de 1974, aunque ya se venía gestando en el Ajax de Amsterdam donde el eje de todo el juego era Johann Cruyff, llenando la cancha con vitalidad y talento, a la manera de Alfredo Di Stéfano, bajo la conducción del sagaz entrenador Rinus Michel. Ese conjunto consiguió una mecánica funcional cercana al ideal del fútbol; pasar de la defensa al ataque en cinco o seis segundos de un modo arrasador; pasar del ataque a la defensa en bloque con casi idéntica velocidad.
En el ataque, Holanda expresaba claramente dos características: 1) avance masivo, en oleadas; 2) apoyo constante al hombre que tenía la pelota, de modo que siempre tuviera por lo menos a dos compañeros cerca asegurándole superioridad numérica para defender su posesión.
De esa forma, aunque la rotación de sus jugadores sin mantener posiciones fijas le diera un perfil de fútbol circular, la ofensiva holandesa armaba triángulos en todo el frente de ataque. Es lo que mostramos en el gráfico A haciendo la salvedad de que los apellidos indicados son simplemente ejemplos. Porque cualquiera podía ocupar los extremos, el centro del ataque, los escalones de apoyo. Las posiciones de Jarsen, Rijsbergen y Haan como cobertura defensiva eran lo único repetido.
Así como empeñaba a la mayoría de sus efectivos en sus acciones de ataque, Holanda defendía con ocho hombres más el arquero cuando el balón pasaba a poder del adversario. También en esta fase de la lucha, los futbolistas del equipo naranja formaban triángulos en su propia mitad del terreno, de modo que cada holandés contaba con cobertura adecuada a sus espaldas, tal como se puede observar en el diagrama B.
Delante del líbero que podía ser Haan se desplegaba un primer abanico defensivo de cuatro hombres con Janesen como marcador central y más adelante, otro abanico de tres. Uno de estos últimos era el cerebro del conjunto, Cruyff, normalmente en posición de vértice adelantado del triángulo que podían completar Krol y Rijsbergen. Arriba quedaban solamente como puntas preparadas para el contraataque, Rep por la derecha y Rensenbrink por la izquierda.
Ese estilo de juego fue definido en una certera síntesis de un periodista brasileño como la desorganización organizada . El secreto de esa revolución táctica, aparte de la jerarquía y el talento de Cruyff y sus acompañantes Van Hanegem, Neeskens y Rensenbrink, era el movimiento simultáneo de varios jugadores en distintas direcciones, aunque uno solo tuviera el control de la pelota.
Holanda, en última instancia, le dio valor total y definitivo al concepto fútbol asociado .
Por eso, aunque no haya conquistado la Copa del Mundo, entró en la historia pisando fuerte y se quedó para siempre.