Viggo Mortensen
15/11/2012
Me encantó el gol de Bordagaray contra Unión, y aún más el pase que le dio Stracqualursi.
Lo de imitar el cancherismo de Cristiano Ronaldo no tanto. Que festeje nomás, pero prefiero los bailecitos de antes, como el que se dio con el Papu Gómez contra Boca cuando los dirigía el Cholo Simeone en 2009, o el del partido contra Huracán en 2010 cuando lo dejó tirado en el suelo al arquero Quemero. Nuestra defensa jugó en general muy mal en Santa Fe, y el manejo de la pelota en el mediocampo fue muchas veces horriblemente vago. Incluso Buffarini, que suele entenderse bien con sus compañeros y proteger bien a la pelota, estuvo muy desprolijo contra los Tatengues. En la goleada contra All Boys San Lorenzo había jugado muy bien, e incluso contra Quilmes, a pesar de empatar un partido que tenía que haber ganado, los nuestros jugaron mucho mejor como equipo. No sé que pasó, pero no parecía haber mucha conexión o fluidez entre nuestros jugadores contra Unión. A ver si el equipo puede volver a jugar armoniosamente como lo hizo en Floresta el pasado fin de semana.
Tuve la gran suerte de trabajar en Estambul la últimas tres semanas, y he aprendido que los cuervos y las águilas negras se parecen bastante. Además de ser una ciudad impresionante, con unos 17 millones de habitantes y una trayectoria histórica y socio-cultural difícil de asimilar por ser tan rica, hermosa y dramática, también tiene el Beşiktaş J.K. (Beşiktaş Jimnastik Kulübü), fundado en 1903. Fui a ver tres partidos en el estadiode este club — un partido de copa y dos de liga. Dos victorias seguidas por un empate agónico contra uno de sus grandes rivales, el Bursaspor. El Beşiktaş (se pronuncia “Beshiktash”), de lo que vi, va para adelante y es muy luchador, lo que, según me explicaron algunos hinchas Aguilas Negras, es su estilo tradicional. Los hinchas se enojaron cuando, con ventaja en el marcador contra el Bursaspor, el técnico mandó retroceder un poco al equipo para proteger el resultado. Estoy de acuerdo con esos hinchas que esta táctica atípica le costó la victoria al Beşiktaş. La hinchada es muy parecida a la nuestra, de mucho aguante y con fama de ser la más apasionada e ingeniosa de la liga turca. Cantan sin parar. Se saludan con “Kara Kartal Oley!” (“¡Olé Aguilas Negras!”). Como el CASLA campeón del 1968, el Beşiktaş del 1991-92 fueron los primeros en ser campeones invíctos de la primera división de su país. Juegan un torneo largo, como lo hacen todos los equipos europeos. Las remeras y bufandas especiales que dicen “Feda” (“Sacrificio”) las venden para recaudar 100% para beneficio del club.
Cuando la directiva se dio cuenta que yo estaba yendo a los partidos, me invitaron a ver su museo y a pisar la cancha. También me regalaron una camiseta del equipo, firmada por los jugadores actuales.
Otra cosa que me gustó mucho como cuervo fue que las calles del barrio de Beşiktaş están llenas de banderas azules y rojas. Incluso el Gran Bazar de Estambul, que data del siglo XV y tiene unas 60 calles y más de 4.000 tiendas, lleva nuestros colores por todo su interior:
Al los del club les expliqué la historia del Gasómetro y la importancia de la Vuelta a Boedo, y que San Lorenzo también es un club muy de barrio. Les regalé una bandera de San Lorenzo del ’68 y una remera para nuestra Vuelta, como la que tengo puesta en las fotos. Surgió la idea de crear una hermandad entre el Beşiktaş y el CASLA. A ver si eso le interesa en algún momento a nuestra directiva, y si se puede organizar un partido amistoso entre nuestros clubes. A los del Beşiktaş les parece una linda idea. Varios hinchas Aguilas Negras, al enterarse un poco de la historia de San Lorenzo y la deseada Vuelta, preguntaron si podían mandar dinero desde Turquía. Claro que se puede, les dije, y les pasé la información sobre los metros cuadrados que pueden comprar si quieren.
Un dato más con respecto a la conexión CASLA/Beşiktaş fue que varios miembros de nuestro equipo de filmación se hicieron lindas remeras sanlorencistas para el último día de rodaje. Es evidente que los turcos tienen muy buen gusto:
También fui a ver un partido del Galatasaray en su enorme estadio nuevo, y aunque es uno de los equipos más grandes de ese país, para mi su hinchada no es tan apasionada como la del Beşiktaş. Será porque están acostumbrados a ganar. Es un club más o menos equivalente al River Plate en lo de su historia, estadio y tamaño de hinchada. Fui a ver ese encuentro, un partido de la Liga Champions contra el club rumano CFR Cluj, con siete ingleses de nuestro equipo de filmación. Llovió toda la tarde y la cancha era un charco. Un partido malísimo, pero el ambiente en el estadio fue bueno. Los ingleses se pusieron las remeras rojas y amarillas de ese equipo, pero yo les dije que ya era simpatizante del Beşiktaş y no podía vestirme como ellos. Tampoco me puse la remera del Beşiktaş. Fui con una remera cuerva para que los hinchas “Leones” no intentaran darme una paliza por ser “Aguila Negra”:
A las dos semanas los lleve a esos 7 ingleses y algunos más del equipo a ver al Beşiktaş, y entonces, impresionados por la imparable pasión de los locales, cambiaron de equipo:
Yendo recién al aeropuerto Atatürk en Estambul vi un amigo volando durante varios minutos al lado de nuestro remis. Me pareció una señal muy buena para el futuro que compartiremos todos los Kargas (“cuervos” en turco):
